Which school do you want to support?
Incluso en los períodos de normalidad, pocos padres comprenden exactamente el sistema masivo de educación de California.
Muchos creen que sí (¡después de todo, vivieron su propia educación!), pero se requiere una dosis de humildad. El sistema educativo en su totalidad rara vez cambia de un año a otro, pero ha cambiado considerablemente desde la Gran Recesión del 2008 y aún más dramáticamente desde la pandemia de COVID-19 del 2020. Incluso en los tiempos ordinarios, los mitos y las ideas anticuadas tienden a persistir.
Ed100 existe para desmitificar el sistema escolar de California. Empecemos por lo obvio: el sistema es muy, pero muy grande.
Las inmensas estructuras escolares de California |
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Millones de estudiantes. California es el hogar de 40 millones de personas, las cuales incluyen 6 millones de estudiantes en las escuelas primarias y secundarias. Aproximadamente una de cada siete personas en California es un estudiante en grados K–12. Hay casi medio millón de estudiantes inscritos en cada grado escolar. |
Miles de escuelas. Hay aproximadamente 11.000 escuelas en California, más escuelas que Starbucks. |
Miles de maestros. En los Estados Unidos, existen más maestros que soldados, médicos, abogados o policías. Hay aproximadamente 320.000 maestros en California. |
Miles de millones de horas. Cada estudiante en las escuelas primarias y secundarias invierte aproximadamente 1000 horas en la escuela por año, sumando un total anual colectivo de 6.7 mil millones de horas. Para comprenderlo mejor desde otra perspectiva, ese número es mayor que las horas invertidas durante una década para lanzar la misión Apollo. Es casi 20 veces mayor que el total de horas invertidas en construir la pirámide en Guiza. |
Miles de millones de dólares. California tiene una economía gigante. Los gastos en educación primaria y secundaria representan un tres por ciento de dicha economía. (Esto no impresiona, dado el contexto, el cual comentaremos en la lección 8.1. Por ahora, el punto es que el sistema es grande.) |
Existen razones sólidas por las cuales este sistema educativo gigantesco tiene que ser especialmente complejo. De manera similar a las poblaciones de Texas y Florida (y a diferencia de la de Nueva York, por ejemplo), la población de California ha crecido y cambiado rápidamente. El sistema escolar ha tenido que crecer y cambiar con ella.
Los estudiantes de estos estados en crecimiento tienen una gran variedad de necesidades. Para suplir dichas necesidades y encontrar un equilibrio entre ellas, el sistema educativo debe ser masivo y personal al mismo tiempo, lo cual lo convierte, inevitablemente, en un sistema complejo. Para que funcione bien para todos los estudiantes, debe funcionar para cada uno, incluso durante una pandemia. Ese es un verdadero desafío.
En California, uno de cada cinco estudiantes vive en la pobreza. Aproximadamente una quinta parte de ellos están aprendiendo inglés. Algunos niños van a la escuela listos para el jardín de niños, pero no es el caso de la mayoría. Aproximadamente la octava parte de ellos tienen necesidades especiales de aprendizaje. Todos los estudiantes necesitan maestros que puedan enseñar material complejo. Y líderes efectivos. Y acceso a las artes. Lo cual requiere de dinero. Y…
…nos estamos adelantando. Llevar la educación en la forma adecuada requiere que muchas cosas se hagan de la manera correcta. Y puesto que pensar en todos estos aspectos en el mismo momento es demasiado, Ed100 los trata por separado. Resulta más fácil comprender el sistema al abarcar un tema a la vez. Ed100 explica lo que debe saber sobre el sistema educativo de California y elimina los mitos.
Pero puede que se pregunte: “¿realmente necesito comprender el sistema que gobierna las escuelas de California? ¿Es posible hacerlo?” Las respuestas son sí y sí.
Comprender el sistema le será beneficioso para sus hijos, por supuesto, y el objetivo de Ed100 es lograr que el sistema sea comprensible. Pero hay algo aún más importante: le guste o no, usted, como padre involucrado o miembro de la comunidad, se encuentra en el centro del sistema de responsabilidad de la educación de California. No existe un vigilante independiente en el sistema. El vigilante es usted. El sistema depende, literalmente, del soporte atento de los votantes locales, activos e informados, que puedan abogar por lo que es correcto y lo que se necesita.
Para tener influencia cuando lo necesite, debe saber de lo que está hablando. Ed100 puede ayudarlo con eso.
Los resultados educativos de California han mejorado mucho a largo plazo. Pero siguen siendo bastante mediocres.
El contenido principal de Ed100 es una serie de breves lecciones, incluida esta. (Contamos también con un blog, el cual brinda más detalles y ayuda a comprender las condiciones perjudiciales, tales como la pandemia del coronavirus. Además, tenemos una caja de herramientas para ayudar a fomentar el diálogo y el aprendizaje, pero las lecciones son el contenido principal.) Está leyendo la lección 1.1, la primera lección del primer capítulo. Al final de cada lección, encontrará una pequeña prueba que refuerza los conceptos principales. Al aprobar una prueba, ganará un boleto (entraremos en más detalles en breve); al aprobar todas las pruebas se convertirá en graduado de Ed100.
Puede hacerlo. Es gratis e importante. Si completa todas las lecciones, estará, en palabras de una dirigente estatal, intimidantemente bien informado. (No lo dijo en broma. Los padres informados no son fáciles de desestimar.)
Este es el punto principal de la lección 1.1: en California, los resultados de la educación primaria y secundaria han mejorado mucho a largo plazo. Pero siguen siendo bastante mediocres.
Las escuelas tienen múltiples propósitos, algunos de los cuales son directos y claros, mientras que otros son difíciles de medir. Obviamente, una de las tareas centrales de la escuela es ayudar a los estudiantes a aprender la materia académica a nivel de grado.
Cada año (con excepción del 2020, debido a la pandemia de COVID-19), algunos estudiantes estadounidenses de 4.º y 8.º grados toman las pruebas para la “Boleta de calificaciones de la nación”. En la comunidad educativa, raras veces se le llama por ese nombre. Para los conocedores, estas pruebas se conocen como la Evaluación nacional de progreso educativo o NAEP, por su sigla en inglés. (Se pronuncia “nep”.)
En realidad, pocos niños toman las pruebas NAEP.
En realidad, solo unos cientos de miles de niños toman las pruebas NAEP. Estas no son las pruebas que todos los estudiantes deben tomar cada año. Se las llama la Evaluación del desempeño y progreso de los estudiantes de California (CAASPP, por su sigla en inglés) o las pruebas Smarter Balanced. Las pruebas NAEP son distintas, y su propósito es puramente estadístico. Diseñada para ser fiable y coherente de un lugar a otro y de un año al siguiente, evalúa qué tan bien los estudiantes conocen el contenido académico básico de su nivel de grado. Las puntuaciones de NAEP, a pesar de ser imperfectas, permiten que los investigadores y legisladores monitoreen el sistema educativo en general, comparando los logros de los estudiantes por año, estado, notas y subgrupo de estudiantes (por ejemplo, por raza, grupo étnico o factores socioeconómicos como ingresos familiares).
Las calificaciones NAEP no suelen cambiar rápidamente. Francamente, casi nada cambia rápidamente en el sistema educativo, y este es un tema recurrente de Ed100.org. Cada año, las puntuaciones suben o bajan un punto o dos, pero las calificaciones del año anterior continúan siendo el mejor indicador de las calificaciones del año siguiente. Tiene sentido, ¿verdad? El sistema educativo es como una armada de barcos gigantes, cada uno impulsado por miles de remos pequeños. Cada año, las personas que reman tienen mucho en común con aquellas que remanaban durante el año pasado. Las corrientes que subyacen una comunidad escolar también suelen cambiar lentamente. Puede que los libros y las herramientas cambien un poco. Los maestros desarrollan sus lecciones, se mudan, se jubilan o cambian de grados. Pero en general, el cambio suele ocurrir lentamente en cada sistema escolar.
Hay excepciones.
Por ejemplo, a nivel nacional, las puntuaciones de NAEP disminuyeron durante la pandemia. Los distritos escolares se esforzaron, con un éxito desigual, por lograr que el acceso a la tecnología fuera universal. Los maestros se esforzaron por encontrar formas de hacer que el aprendizaje fuera atractivo a distancia. La pandemia también aceleró el resentimiento por los exámenes SAT y ACT. Aun así, cuando miremos atrás dentro de unos años, será interesante ver si los resultados cambiaron mucho.
Los niños de California tienden a obtener puntuaciones bajas en las pruebas NAEP. La gráfica que aparece a continuación muestra el índice global de que grupos de niños en cada estado que han obtenido calificaciones del nivel que se considera competente o mejor a lo largo del tiempo. (Saca un promedio de las calificaciones en matemáticas y lectura de cuarto y octavo grados.) La línea gruesa anaranjada representa California. La línea negra representa el promedio de todos los estados excepto California. (Massachusetts es el de arriba. Coloque el puntero sobre la gráfica para ver los detalles. El modelo completo se encuentra aquí.)
Desafortunadamente para los niños de California, parece que estas calificaciones persistentes importan. La mayoría de los investigadores de la educación (pero no todos) estiman que una diferencia de diez puntos en las calificaciones NAEP representa aproximadamente un año de diferencia en aprendizaje académico. Si es verdad, el estudiante medio en California tiene años de retraso en comparación con aquellos de estados como Massachusetts, donde se obtienen las mejores puntuaciones. Mientras tanto, los estudiantes desfavorecidos de California (aquellos que reúnen los requisitos para acceder a comidas gratuitas o a precios reducidos) obtienen puntuaciones que demuestran un rezago de un año más que los estudiantes homólogos de Misisipí.
Quizás estas pruebas no sean del todo justas para los estudiantes de California. Por ejemplo, la forma de realizar las pruebas puede variar un poco de un estado a otro. Algunos estados dan más tiempo a los estudiantes que están aprendiendo inglés. Texas, por ejemplo, no exige que un estudiante tome la prueba si su nivel de inglés es tan básico que la reprobaría de forma vergonzosa. Estas pequeñas diferencias probablemente importen, así que no deber tomar las pequeñas variaciones en las puntuaciones estatales demasiado en serio. Además, puede que la regla general esté equivocada. Quizás diez puntos de diferencia en una prueba NAEP no equivalgan a un año, sino más bien como a nueve meses. O seis. De todos modos, las pruebas no brindan el panorama completo, ¿verdad? Existen muchas maneras de medir el Éxito.
Las diferencias en términos de habilidades entre los niños de California y los de otras partes del país son indisputables.
Y disputarlas sería perder de vista el punto central. La evaluación de lectura del 4.º grado determina si los niños pueden o no leer textos cortos y entenderlos. Las preguntas de matemáticas son bastante básicas también. Año tras año, la imagen se vuelve clara: en comparación con los estudiantes de otros estados, los estudiantes de California están indiscutiblemente rezagados.
Pida la perspectiva de una familia que se ha trasladado a California desde la costa este. Como mínimo, probablemente le digan que el tamaño de las clases en las escuelas de California es mucho, mucho mayor. (En el 2019, ChildrenNow, una organización sin fines de lucro, hizo una comparación de las escuelas de California, Illinois y Nueva Jersey para documentar algunas de las diferencias. El informe se llama Not Enough Adults to Go Around [No hay suficientes adultos].)
Uno podría preguntarse si tiene importancia que los niños se retrasen en un principio siempre que se pongan al día con el tiempo. Pero lamentablemente, la mayoría de ellos no lo hacen. Desde hace muchos años, las investigaciones demuestran que aquellos niños que no leen al nivel esperado al terminar el tercer grado, corren un grave riesgo de no graduarse de la secundaria.
¿De alguna manera sería mejor para el estado o sus niños si las bajas calificaciones pudieran explicarse?
Es importante reconocer que la mayoría de las puntuaciones NAEP de California no parecen tan malas si las desagrega para ver más allá del promedio y comparar las puntuaciones de estudiantes con ventajas y desventajas similares. El Urban Institute lo ha intentado con un informe al que le llama America's Gradebook. En su opinión, la verdadera estrella de la educación pública de EE. UU. es Minnesota:
Otro informe, A Portrait of Educational Outcomes in California (Retrato de los resultados educativos en California), revela que existe poca diferencia entre los distritos adinerados de California y los distritos adinerados a nivel nacional. “La disparidad entre California y la nación está concentrada en los distritos medios y desfavorecidos, en los cuales los estudiantes de California obtienen puntuaciones de un nivel de grado completo por debajo de sus homólogos a nivel nacional. Estos patrones no cambian al hacer las mismas comparaciones dentro de cada grupo étnico.”
Algunos se podrían preguntar: ¿significa esto que los factores demográficos pueden explicar las puntuaciones mediocres que se obtienen en la NAEP en California? Pero esta pregunta a su vez plantea otra: ¿Esto debería importar? ¿De alguna manera sería mejor para el estado o sus niños si las bajas calificaciones pudieran atribuirse al mayor número de los niños de color y los que viven en la pobreza? ¿Es útil imaginar que tienen la culpa? Cuando sean grandes, los niños en nuestras escuelas se convertirán en los trabajadores y líderes de nuestras comunidades. Si queremos que California tenga un futuro prometedor, ¿podemos darnos el lujo de aceptar factores demográficos como justificación de las bajas calificaciones? ¿O aquí entran en juego las desigualdades sistémicas?
En cualquier caso, los datos dejan poco lugar para la duda. En California, los niños de bajos recursos, al igual que los estudiantes latinos, suelen obtener calificaciones claramente por debajo de aquellas de los niños de otros estados. Pero los niños blancos de California no precisamente figuran en la parte superior de la lista, y tampoco lo hacen los niños de California que no reúnen los requisitos para acceder al programa de almuerzos.
Los resultados a nivel estatal no cambian rápidamente.
Estos resultados no son ni casuales ni sorprendentes. No zigzaguean de un año al siguiente ni cambian repentinamente en respuesta a pequeños cambios de política o práctica. Son el producto a largo plazo de un sistema grande y complejo. Una conclusión importante del informe “Retrato” que se mencionó anteriormente es que el sistema de California rinde poco en cada nivel. Las brechas, desfases y disparidades comienzan temprano y suelen empeorar en vez de mejorar. Este es un desafío nacional y tal vez internacional, pero California tiene un historial extraordinariamente malo en lo que a abordar este tema respecta.
A medida que lea Ed100, surgirán algunos temas como los siguientes:
Algunos temas de Ed100 |
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El sistema educativo de California es masivo, pero la educación es personal. |
Las respuestas sencillas, aunque sean tentadoras, suelen ser equivocadas. |
Para que la educación funcione bien, muchas cosas deben funcionar bien al mismo tiempo. |
El dinero no es mágico, pero puede comprar cosas que realmente ayudan. En cambio, la falta de dinero realmente puede hacer daño. |
No todo lo que tiene valor en la educación se expresa en dólares. |
Las reformas tienen la posibilidad de hacer una diferencia si se tratan de quién se encuentra en el aula o cómo se invierte el tiempo (una máxima de Mockler). |
Más vale prevenir que curar. |
Casi todas las tendencias a largo plazo son buenas. Más vale ser impaciente que pesimista. |
Las personas que trabajan en la educación casi siempre tienen buenas intenciones. Escuche más atentamente. |
Las sanciones rara vez fomentan la capacidad. |
A fin de cuentas, la educación depende de la voluntad pública, la cual se mide en impuestos. |
No todas las investigaciones son buenas. Desconfíe de las conclusiones ilógicas. |
Si tiene dudas, mire lo que hacen las familias ricas por sus hijos (una máxima de Mockler). |
Tal vez haya llegado a Ed100 porque desea ayudar a mejorar la situación. Existen diversas estrategias para lograr el cambio, y las exploraremos una por una. Pero antes, es importante sentar las bases, así que ampliemos un poco el contexto. La siguiente lección examina como California se compara no solo con el resto de los Estados Unidos, sino con el resto del mundo.
Desplácese un poco más hacia abajo para tomar la prueba de esta lección. ¡Apruébela, obtenga su boleto y siga adelante!
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